Quizá tengas dudas sobre si ser la más feitiña de la verbena o la más riquiña de la playa.
Puede ser una decisión complicada pero .. te ayudamos a elegir!!
Soy riquiña?
Podrías ser rabuda o túzara pero elegiste ser riquiña. O tal vez no lo elegiste pero te nace! No luches contra tu destino, abraza el ser riquiña.
En Galicia todo es riquiño pero, qué significa en realidad? Imagina que te encuentras una adorable gatita; tan tierna y encantadora que te derrite de ternura y dan ganas de abrazarla, de achucharla y colmarla de mimos. Ese es el significado de RIQUIÑA
Rica no, RIQUIÑA
¡Ah, la “riquiña” gallega despierta suspiros y sonrisas. Si no eres gallego, déjame explicarte: “riquiña” es una palabra mágica que puede significar “pequeñita”, “adorable” o simplemente “linda”. Pero aquí viene lo gracioso: en Galicia, ¡todo es riquiño! Desde una abuela hasta una empanada, pasando por un pulpo a la gallega o incluso una ola del…
Pequeñita, tierna, adorable .. a que apetece ser RIQUIÑA? Por supuesto, también puedes, sin complejos y orgullo puedes ser RIQUIÑO !!
O frefieres ser feitiña?
Si en lugar de la dulzura riquiña eres más traviesa y divertida, con algo de picardía en la mirada es posible que con tus bromas y ocurrencias arranques alguna exclamación que diga “QUÉ FEITIÑA!”
Además, alguien feitiña no es guapa .. es que está tan bien hecha, tan bien proporcionada y configurada que cada uno de sus pasos, sus movimientos y cada detalle está en perfecta harmonía .. irradia el equilibrio cósmico de lo impresionante y lo increíblemente chic!
Sudadera FEITICEIRA
Una mujer FEITICEIRA es como el gato que siempre sabe más de lo que aparenta. Imagina a alguien que camina con esa confianza hechicera, lista para enfrentarse a los problemas y resolverlos con un toque de magia. Maestra del caos organizado, con su sonrisa pícara y sus ojos chispeantes que podrían hechizarte en un abrir…
Resumiendo: Tener dudas sobre si ser la más feitiña de la verbena o la más riquiña de la playa puede ser una experiencia común y emocionante. Por un lado, ser la más feitiña de la verbena implica ser traviesa, divertida y quizás un poco picarona, lo que puede añadir un toque de alegría y energía a cualquier evento. Es la oportunidad perfecta para destacar con ingenio y encanto, atrayendo miradas y risas a tu alrededor.
Por otro lado, ser la más riquiña de la playa sugiere ser tierna, encantadora y adorable, irradiando dulzura y ternura en cada paso que das bajo el sol. Es la oportunidad de disfrutar de momentos relajados y tranquilos, envuelta en la belleza del entorno marítimo y dejando una impresión de calidez y afecto en quienes te rodean.
Ambas opciones tienen su encanto y su lugar en diferentes situaciones y contextos. La decisión puede depender del estado de ánimo, la ocasión o simplemente de cómo te sientas en el momento. ¡Lo importante es disfrutar de ser tú misma, ya sea con un toque feitiño o riquiño, y brillar con autenticidad y alegría en cualquier lugar que elijas!